lunes, 22 de diciembre de 2008

EFECTO CALCETÍN



Sólo tengo 30 min para escribir esta arriesgada carta. Los nervios y el teclear SÓLO con mi mano izquierda dificulta aún más la tarea. Mi mano derecha está durmiendo. 30 min cada 3h es el tiempo que exige el contrato. Contrato que YO he firmado, bueno NO, pero sí, claro.
Al principio era hasta divertido. Un día compartimos una cerveza y era gracioso ver cómo se lanzaba dentro de mi jarra y salía cada vez más blanda y borracha. Yo también. Entonces empezamos a recordar buenos momentos: aquellos triples en algunos partidos ajustados...sus encuentros con la del otro calcetín (decía que no era un calcetín cualquiera, era “el otro”)....pero también recordamos momentos tristes....como cuando tenía cogida la mano de mi abuela para que no se fuera.....y se soltó...acabamos llorando, digo las dos porque ella me secaba las lágrimas....

Pero ahora nada es igual. Además de los 30 min de descanso, en el contrato pide dormir en mi almohada. Dice que no quiere levantarse con dolor de muñeca y para evitar...ejem...mis pedos. También ha puesto un horario para ensayar de 17h a 19h. Y le da igual si yo estoy trabajando, comiendo o nadando en la piscina. Por suerte a esa hora ya he salido de mis clases de inglés, que por cierto, no para de apuntar todo en una libreta. Dice que es para su personaje “Sir Paul”, la versión inglesa del “Vampiro Ramiro”. Un vampiro que en vez de sangre necesita sexo para ser eternamente joven. Además dice que quiere tantos personajes como calcetines diferentes pasen por su mano. Eso sí, colabora en la customización cosiendo mientras la izquierda recibe los pinchazos impasible. He pensado en comprarle un dedal para cada dedo. Me da pena, está esclavizada, como la otra ha dejado de peinarme, de rascarme cuando me pica, hasta se niega a limpiarme el culo!!. Por suerte no ha sufrido el efecto calcetín. Imaginad cada extremidad de mi cuerpo independiente: un pie persiguiendo una cucaracha para pisarla, el otro en unos de sus baños hidromasaje, una mano intentando escribir un guión y la otra en su hora de descanso durmiendo plácidamente...estallaría una guerra entre ellas? Contra mí?...nonono, no lo quiero ni pensar.

No sé cómo va acabar todo esto. Tengo miedo y..¡MIERDA! Se está estirando, creo que se va a despert65ttyt6y5t6y5

DEDICADO a los dos culpables de mi nueva forma de reir:
Gracias Iraima.
Gracias Raúl.

Y ahora una receta para reducir la concentración de tristeza en el alma:
-1 calcetín
-1 cámara
-y una buena canción
Se recomienda “COMPARTIR”, en parejas o en grupo. El efecto es INMEDIATO.

Gracias también a la de “el otro calcetín”.

Niña Extrarradio.


Para ver una cata de la receta clickear:
o ver mis videos en el Facebook de los coj..
#/video/video.php?v=63533728832&subj=1397470719