DR MATEO

-Buenas tardes, tengo visita con el doctoooor...sé que tiene una eme y una te, Mateo?
-Serás Tomás.
-Eeeeso, Tomás.
-Siéntese en la sala de espera.
-Gracias.

Una vez sentada me di cuenta de lo afortunada que era, la única que no llevaba escayola ni tenía más de 60 años.
Sale el doctor en mi busca, le doy la mano y entramos en la consulta.

-Doctor, esto no va bien, ya han pasado 5 meses.
-(sopla) Sube a la camilla.
-Aysh, uuy, aquí, aquí me duele.
Blablabla blablabla
-Sabes que el primer día que viniste, pensaba que eras de la asociación de sordomudos que estoy tratando?
-Jaja, ostras, es verdad, vine con una amiga porque me acababan de sacar una muela y no podía hablar.

Y otra vez le doy la mano, salgo de la consulta, y hasta la próxima visita.

Quiero dejar de verlo.
Quiero salir corriendo.
Quiero llegar al bicing y no encontrar aparcamiento.
Quiero poder gatear para hacer carreras con mi soRbino.
Quiero volver a fichar este año.

Quiero dejar de ponerme guisantes congelados, flogodlfjdhkfhgkfén, y de tomar el puñetero artilane que sabe a tomates podridos.
Quiero dejar la acupuntura, las infiltraciones y las sesiones de rehabilitación.
Pero sobretodo,
Quiero dejar de quejarme.
Qué sabré yo de dolor...!!!
Qué sabré yo de sufrimiento...!!!
No tengo ni puta idea!!!