EN BUSCA DE LA MOTIVACIÓN

Lunes. Entreno. Haciendo pucheros y pataleando como una niña chica casi enganchada como una garrapata a la puerta de casa: “-Jooooo, que no quierooooo!!! Abueeelaaa, vé tú a entrenar por mi porfaaaaa!!!!” Ya en el coche: “Quien me mandará meterme en estos jaleos, la verdad que no sé que hago aquí...” Con esas ganas poco se podía esperar de mi fantabuloso entreno. Fueron horas NO aprovechadas y horas NO positivas para el resto de mis compañeras. Fue un paso más hacia el hundimiento de mi carrera (o más bien trote) baloncestística. En la ducha...con ganas de confundir el agua con mis lágrimas, deseé con todas mis fuerzas que aparecieran fichajes salvadores para que yo pudiera tirar la toalla. Qué cobarde!!!
Miércoles. Entreno. Sólo habían pasado dos días y ya era otra persona. Había partido amistoso y no quedaba rastro de mi “LOW BATT” del lunes. También, como una niña pequeña en su primer encuentro estrenando bambas nuevas, me dirigí al pabellón con la esperanza de resucitar mi confianza. Ooooooootra vez pataleando....el equipo contrario estaba en el campo equivocado y no iba a venir. Mala comunicación, algo bastante habitual en esta suciedad, digo, sociedad. Hicimos partidillo entre nos y 3 chicas del “B” que vinieron a echarnos un cable, nos pusieron las pilas. Estuvo realmente bien y me fui bien contentica y satisfecha a casa y deseando que llegara el fin de semana para jugar el partido.
Después de esto, no me queda duda que soy la INDECISIÓN en persona. Realmente quiero seguir con esto? Yo sólo quiero pasármelo bien y disfrutar jugando y lo único que consigo son nervios, inseguridad y sentirme ridícula. “Sé que puedo....” me repito cada día...
Sólo me falta un poco de motivación...pero no la encuentro...A veces recuerdo aquel chico en las gradas que me daba los ánimos necesarios. Me lo imagino y al mismo tiempo explota como una burbuja. A veces pienso en poner un anuncio: “Se busca novio de fin de semana, no es necesario que le guste el básquet ya que se le hará entrega del Sport, Mundo Deportivo o Marca a la entrada de cada pabellón. Imprescindible un cálido abrazo acompañado de un beso cerquita de la oreja mientras susurra: hagas lo que hagas para mí eres la mejor! No se pedirán favores sexuales ni compromisos domingueros familiares. El contrato durará lo que dure la liga. Interesados envíen una foto y teléfono a mi correo.” Jajajajaja, es broma, no quiero una motivación externa, primero quiero que venga de dentro....
Y qué decir en el trabajo...tres cuartos de lo mismo...tardo 3 dias en realizar una tarea que antes hacía en una sola mañana...Qué me está pasando?

2 Dias después...la decisión de un buen amigo de cambiar el rumbo de su vida, hace que los 2 únicos ladrillos de mi vida se quiebren y corren el riesgo de desmoronarse. Depende de mí que los reconstruya en el mismo lugar o arriesgarme y ver que detrás de ellos hay más caminos que no eran visibles para mí.
Entonces es cuando me planteo: hasta qué punto busco motivación? Quizás tendría que buscar el VALOR de tomar una DESICIÓN y ELEGIR lo que realmente me hace sentir bien. El valor de decir NO.
Admiro a este amigo y le agradezco la verdadera lección que me ha dado. De nuevo estaba caminando por el sendero más fácil y cómodo y él me ha enseñado que también existen curvas, en las que puedes o no caerte, perderte o ser divertidas, pero al fin necesarias.
Debe ser inceible la sensación de LIBERTAD, SEGURIDAD y SATISFACCIÓN que han tenido todas aquellas personas que tuvieron el valor, alguna vez en sus vidas, de elegir, a pesar de ser un camino DIFÍCIL, aquello que les LLENABA realmente. Cuántas vidas tenemos para intentarlo si NO nos atrevemos?? Siempre he dicho que si existiera la reencarnación yo sería una tortuga para poder esconderme y protegerme bajo mi caparazón. Pero hay que creer en esta vida y ya va siendo hora de dejar MIEDOS porque quizás cada vez que escondo la cabeza en mi caparazón me esté perdiendo COSAS MARAVILLOSAS...o no, pero como se suele decir: qui no arrisca no pisca!!!


Gracias y esta vez tengo que añadir: y perdón.
Siento chicas, y Josep, tirarme del barco mientras navegamos, pero necesito nadar. Me queda grande y mis necesidades se acercan más a una modesta barquilla para disfrutar de las pequeñas calas. Las que me conocen saben que soy de carácter débil y hay situaciones que me superan. Psicológicamente no puedo. Lo siento y siento informaros de esta manera, pero es como mejor me expreso.
Os deseo mucha suerte. Sois grandes jugadoras y grandes personas. No dudo que conseguiréis ser también un gran equipo.
Con gran pena me despido como compañera de equipo pero no como amiga.

Con cariño,
la Panto.